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miércoles, 5 de diciembre de 2012

Manual de escuelas de servicio social y trabajadores sociales. Parte 6


VI. CUESTIONES QUE SE PLANTEAN EN LA ENSEÑANZA Y EL APRENDIZAJE DE LOS DERECHOS HUMANOS

La enseñanza y el aprendizaje de los derechos humanos en un contexto de trabajo social no son fundamentalmente diferentes de los de otros temas. Exigen aplicación y análisis, así como un compromiso personal con la comunicación y la comprensión. Esta sección del Manual brinda algunas orientaciones para el proceso de enseñanza. El esbozo presentado tiene por objeto ilustrar los elementos de un marco para su desarrollo en las aulas y en la práctica.

A. Reconocimiento de las cuestiones de derechos humanos

Muchos aspectos del trabajo social, y la esfera del derecho social en sí, tienen una dimensión implícita de derechos humanos. El primer requisito, para profesores y estudiantes es capacitarse para reconocer y examinar esas dimensiones, tanto en la teoría como en la práctica. Los temas y dilemas de las secciones anteriores, y los casos prácticos que figuran a continuación están ideados para inducir al reconocimiento y ayudar al estudio por parte del personal docente, los estudiantes y los supervisores/profesores sobre el terreno.

Siempre resulta útil examinar los tres niveles de análisis (micronivel, nivel intermedio y macronivel) antes de fijar metas en respuesta a las cuestiones. Es necesario también estudiar la posibilidad de utilizar enfoques preventivos, de desarrollo y de acción social en la intervención del trabajo social.

B. Análisis

Un enfoque tradicional del trabajo social consiste en comenzar a nivel individual, quizá en un contexto familiar. De forma paralela, muchas cuestiones de derechos humanos básicos también tienen su punto de partida en los derechos fundamentales del individuo. Sin embargo, ese nivel de análisis tiene que estar complementado por un análisis en otros niveles (nivel intermedio, macronivel) que implica la comprensión de las causas básicas de los problemas individuales y colectivos y la formulación de respuestas a los tres niveles.

Otro enfoque de los problemas sociales, ya practicado en las escuelas de servicio social, consiste en señalar inicialmente los problemas o cuestiones sociales al nivel intermedio o al macronivel y estudiar sus consecuencias personales y de organización en la medida en que afectan a la labor de los trabajadores sociales. Sin embargo, para los profesores, profesionales y estudiantes del trabajo social, lo importante es la cobertura y no el punto de partida del análisis, al igual que la incorporación de una dimensión ética y de derechos humanos. Esto implica que los trabajadores sociales han de comprender la interacción existente entre sus propios valores y ética profesional y los valores ajenos, sobre todo de los clientes, y el orden sociopolítico vigente.

C. Respuesta a las cuestiones de derechos humanos

Después de realizar el análisis, los trabajadores sociales tienen que responder. En esta sección se determina un marco en términos generales, aunque, naturalmente, los contextos particulares exigirán diferentes especificaciones.

1. Reconocimiento

Los trabajadores sociales han de reconocer que están respondiendo a una situación que incluye una dimensión de derechos humanos. Dicho en otros términos, han de conceptualizar la situación haciéndose a sí mismos preguntas como: ¿qué derechos humanos se plantean en esta situación? ¿cuáles son los posibles objetivos/medios para cambiarla? ¿son esos objetivos/medios compatibles con las declaraciones internacionales? ¿están permitidos por la legislación nacional? ¿están permitidos pero se ven limitados en la realidad por actitudes o por consideraciones relativas a los recursos?

2. Fijación de prioridades

Son varias las cuestiones de derechos humanos, y quizá las infracciones, que pueden verse implicadas en una situación determinada. Por consiguiente, los trabajadores sociales quizá tengan que examinar las prioridades relativas para intervenir conjuntamente con las personas afectadas. Esto llevará a un proceso de fijación de objetivos en un contexto específico y de forma que pueda evaluarse el logro de esos objetivos. Así, los objetivos formarán parte de una estrategia coherente para responder a la situación desde una perspectiva de derechos humanos, mientras que las estrategias tendrán en cuenta los grupos destinatarios a diferentes niveles, más allá del problema inmediato del cliente.

Preguntas para debate

a) ¿De qué orientación disponen o pueden disponer los trabajadores sociales al decidir cómo responder prácticamente a las cuestiones de derechos humanos?

b) ¿Son los profesores de trabajo social sobre el terreno capaces de apoyar y orientar a los estudiantes desde una posición de conciencia activa de los problemas de derechos humanos en la práctica? ¿Están las leyes, códigos e instrumentos jurídicos internacionales fácilmente a disposición de los estudiantes?

c) ¿Cómo reacciona o cómo actúa un trabajador social en los casos en que sus puntos de vista y los de su cliente difieren en cuanto a las prioridades de intervención en cuestiones de derechos humanos?

d) ¿Cómo puede el trabajador social sensibilizarse a los comprensibles temores de la gente al defender sus derechos humanos, como el temor a las represalias, el desahucio, la pérdida del empleo o la desaparición?

D. Grupos de referencia para el trabajador social

Para apuntalar la ejecución de las estrategias de intervención, el trabajador social necesita elementos de apoyo. Este puede proceder de particulares, organizaciones, grupos y movimientos que participen en cuestiones de derechos humanos similares. Pueden ser grupos de solidaridad, grupos de autoayuda, sindicatos, colegios profesionales (como los de médicos y enfermeras), funcionarios encargados de aplicar la ley, organizaciones no gubernamentales concretas, partidos políticos, iglesias u otros.

Preguntas para debate

a) ¿Cómo se pueden establecer y mantener vínculos entre los trabajadores sociales y las organizaciones competentes? ¿Puede favorecerse esto mediante el empleo u otras actividades de formación durante la capacitación en trabajo social?

b) ¿Cómo pueden ofrecer los trabajadores sociales sus conocimientos a organizaciones o grupos de apoyo para generar un intercambio de la conciencia y el apoyo profesionales?

c) ¿Hasta qué punto pueden formar parte de la red de apoyo los diferentes clientes o grupos: cómo pueden responder los trabajadores sociales a las limitaciones prácticas que puede haber para la participación activa de los clientes (por ejemplo, límites impuestos por el tiempo, presiones y otras limitaciones)?

d) ¿Qué aptitudes de negociación y promoción necesitará el trabajador social/miembro de la escuela de servicio social?

E. Evaluación

La intervención de los trabajadores sociales deberá evaluarse, al menos conjuntamente con el cliente y el supervisor del trabajador social. Se deberá incorporar a ese proceso una evaluación específica de las medidas adoptadas en respuesta a las cuestiones de derechos humanos planteadas por una situación determinada. Aunque no se haya producido un cambio inmediato, existe la obligación con el cliente y los grupos interesados de evaluar lo que era posible, lo que se ha intentado y los resultados.

Preguntas para debate

a) ¿Cómo se puede hacer que el cliente participe en la evaluación?

b) ¿Qué métodos e instrumentos se utilizarían para la evaluación (criterios, indicadores)?

c) ¿Hasta qué punto se han definido con claridad los objetivos iniciales y la especificación de las cuestiones de derechos humanos?

d) ¿Se han evaluado también otras posibilidades viables?

e) ¿Hasta qué punto han sido útiles o pertinentes (o inútiles) en un caso determinado las leyes nacionales vigentes, a la luz de los instrumentos jurídicos internacionales?

F. Medidas de seguimiento

Después de conocer el resultado (evaluado) del caso determinado, el trabajador social y el organismo al que pertenece quizá tengan que examinar medidas futuras, a la luz del éxito o el fracaso de las estrategias anteriores. Una vez más, esas medidas deberán conceptualizarse en diferentes niveles y en diferentes contextos. Así, por ejemplo, es posible que el trabajador social tenga que estudiar cómo cambiar las políticas del organismo para ajustarlas más a los instrumentos internacionales de derechos humanos, o que necesite alentar a su organismo a comunicar sus preocupaciones a otros organismos de trabajo social o con la comunidad. Un medio práctico de promover la comprensión de los derechos humanos podría consistir, entre otras cosas, en que el organismo ofreciera capacitar a supervisores en la planificación a plazo corto, mediano o largo, y facilitar el acopio de datos para futuras investigaciones.

Preguntas para debate

a) ¿Dará tiempo/capacitación el programa de estudios de trabajo social para adquirir conocimientos analíticos, de planificación, operacionales y de evaluación, a fin de que puedan adoptarse medidas futuras con la participación del trabajo social?

b) ¿Cómo puede el programa de enseñanza impartir capacitación en materia de liderazgo, para uno mismo y para otros?

G. Reconocimiento de las consecuencias de las actividades

en materia de derechos humanos

Para los trabajadores sociales, al igual que para los individuos, clientes y grupos, el compromiso activo con el fomento de la conciencia, la comprensión y la realización de los derechos humanos puede resultar perjudicial (por ser objeto de crítica), peligrosa o incluso mortal (por ser objeto de sanciones penales o militares), aunque tenga éxito en el logro de los objetivos o el aumento del respeto por los derechos humanos. Hay que alentar a los estudiantes a que tengan una conciencia realista de esas consecuencias, que en algunos casos pueden proyectar una sombra amenazadora sobre muchos aspectos de su trabajo.

Al mismo tiempo, se debe alentar a los estudiantes y profesores a que aprendan a reaccionar a esos peligros; por ejemplo, reaccionar al peligro físico mediante precauciones de seguridad apropiadas dentro de los organismos; la defensa propia; el apoyo psicológico colectivo; grupos de autoayuda, y vínculos con otras personas y organizaciones que se ocupen de los derechos humanos.

También se debe alentar a los estudiantes a participar en comités nacionales o específicos de asociaciones profesionales o en organizaciones no gubernamentales nacionales o internacionales de derechos humanos. Esa participación, de paso, permitirá reconocer la situación y la utilidad de la labor en esa esfera y contrarrestará las presiones encaminadas a marginarla.

Preguntas para debate

a) ¿Se reconoce en las asociaciones profesionales y escuelas de trabajo social la utilidad y la importancia del apoyo profesional a los trabajadores que se ocupan de problemas de derechos humanos? Si no es así, ¿pueden indicar los estudiantes y el personal formas de aumentar esa conciencia entre los directivos de la profesión?

b) ¿Qué medios cabe contemplar para responder a las amenazas a organizaciones profesionales o escuelas (sanciones financieras y de otra índole) si no cesan sus actividades en favor de los derechos humanos?

H. Mantenimiento del perfil de las actividades en pro

de los derechos humanos en el trabajo social

Es importante que no se marginen las actividades en pro de los derechos humanos en el trabajo social y la enseñanza del trabajo social. Ello exige:

a) La adopción del principio del respeto de los derechos humanos y la aplicación en la práctica de la enseñanza de los derechos humanos. Esto implica la orientación y el perfeccionamiento del personal.

b) El mantenimiento de materiales de enseñanza adecuados, incluidos los instrumentos internacionales de derechos humanos, estudios de casos, documentos de investigación innovadores y otros materiales en las escuelas de servicio social.

c) La financiación adecuada de la esfera del trabajo en pro de los derechos humanos.

d) El examen del contenido de los cursos existentes, y su revisión/adición para tener en cuenta las cuestiones de derechos humanos incluidas en el presente Manual.

e) Un programa (por ejemplo, seminarios) para el personal docente y los estudiantes, incluidas exposiciones a cargo de activistas pro derechos humanos.

f) El fomento de vínculos de extensión/hermanamientos entre las escuelas de servicio social y las organizaciones de derechos humanos a nivel local, nacional e internacional. Esos vínculos pueden suponer visitas, misiones del personal, intercambios de opiniones, etc., recíprocos.

g) La creación de recompensas y otras formas de reconocimiento de la labor en materia de derechos humanos y del trabajo social, incluidos los trabajos realizados por los estudiantes, y reconocimiento de las víctimas de violaciones de derechos humanos.

h) La integración de las preocupaciones por los derechos humanos en los programas de acción de las escuelas de servicio social o de las organizaciones profesionales de trabajadores sociales.

Preguntas para debate

a) ¿Cuáles son los elementos decisivos que debe adoptar una escuela de servicio social que desee mostrar su compromiso con el valor de la enseñanza de los derechos humanos?

b) ¿Con qué dilemas se podrían enfrentar las organizaciones de trabajo social en sus decisiones relativas a cuestiones de derechos humanos?

I. Labor sobre el terreno

La labor sobre el terreno es una parte integrante de la educación para el trabajo social que brinda a los estudiantes la oportunidad de presenciar la aplicación práctica de la teoría aprendida de los libros y en las aulas. Por consiguiente, es importante que los instructores sobre el terreno ayuden a los estudiantes a determinar los aspectos de derechos humanos en la práctica cotidiana durante sus destinos obligatorios. Las misiones sobre el terreno pueden variar según el nivel de los estudios (estudiantes universitarios, graduados), y se realizarán en entornos comunitarios oficiosos y en organismos e instituciones.

Aunque quizá se pueda destinar a organizaciones de derechos humanos o a proyectos experimentales de activismo en la materia a los estudiantes especialmente interesados en los derechos humanos, es indispensable, como se ha subrayado a lo largo de este Manual, que éstos tengan conciencia de las repercusiones de los derechos humanos en todas las esferas del trabajo social.

La insistencia consciente en la protección de los derechos humanos de todas las personas con que se establezca contacto durante una misión dará profundidad al proceso de aprendizaje. La atención a que la dignidad y el respeto, así como las aptitudes de supervivencia, se conserven y aumenten en los clientes o grupos de clientes determinará las actitudes profesionales de los estudiantes. Por ello, quizá merezca la pena que las escuelas estudien la posibilidad de pedir a los estudiantes que redacten informes acerca de su trabajo sobre el terreno desde la perspectiva de los derechos humanos.

La primera vez que se participa o, en algunos casos, la segunda, en la práctica del trabajo social es decisiva. Mucho dependerá del conocimiento y de las actitudes, tanto de los profesores como de los estudiantes. Los límites y las posibilidades que ofrecen los sistemas sociales, económicos y políticos; las posibles limitaciones de las estructuras de organización; las tradiciones culturales; y el recurso a la protección de las leyes son, entre otros muchos, elementos que se habrán de estudiar en el microcosmos de un problema particular, individual o colectivo, no en un cómodo debate en un aula sino en la realidad de la vida y del sufrimiento.

Preguntas para debate

a) La capacitación y el aprendizaje durante la práctica exigen una cierta adaptación y obediencia por parte de los estudiantes, pero podrían surgir conflictos si éstos creen que los derechos de los clientes o del personal no se han respetado lo suficiente. ¿Cuál debería o podría ser la función del supervisor?

b) ¿Deben fomentarse las iniciativas innovadoras y creadoras de los estudiantes durante sus misiones sobre el terreno?

c) ¿Es probable que, en las escuelas de servicio social, las relaciones entre el personal docente y los estudiantes influyan en las actitudes de estos últimos con los clientes y colegas durante sus misiones sobre el terreno?

J. Investigación

Una investigación académica seria en la esfera del trabajo social y los derechos humanos es un elemento esencial para garantizar el conocimiento y el respeto de esos derechos en la práctica del trabajo social. Esto va mucho más allá de la evaluación de las medidas adoptadas por los profesionales o estudiantes, de las que se trata supra (véase la subsección E).

Hay mucha materia de investigación en la esfera de los derechos humanos: las causas de las violaciones de derechos humanos; la prevención de los abusos de los derechos humanos mediante la concienciación, la labor de apoyo y la acción social, entre otras cosas; la educación en materia de derechos humanos; las medidas jurídicas para oponerse a las infracciones de los derechos humanos; la presión sostenida en el nivel político; los sistemas de alerta rápida; y el reconocimiento y la indemnización de las víctimas de violaciones de derechos humanos, no son sino algunos de los temas que podrían abordar los profesores, profesionales y estudiantes del trabajo social.

Además de su valor científico, una investigación seria podría fijar también normas, ser citada o incluso ser utilizada como criterio en los casos de conflictos y controversias en relación con alguna cuestión de derechos humanos.

Es de esperar que en los próximos años se disponga de talentos y fondos suficientes para realizar una amplia investigación en la esfera del trabajo social y los derechos humanos. Como en tantas otras esferas, su desarrollo y progreso dependen de los conocimientos derivados de una investigación a fondo y continua.

Pregunta para debate

¿Cómo puede fomentarse la investigación académica y otorgarse reconocimiento académico, los conocimientos especializados en el campo de las actividades de derechos humanos en el trabajo social?

K. Actividades dentro de estrategias de intervención para los

desfavorecidos en materia de derechos humanos

Es muy posible que las actividades que se enuncian a continuación tengan importancia en la intervención:

a) trabajar con las burocracias o estructuras de poder locales, regionales y nacionales para promover, desarrollar y realizar los cambios necesarios en las políticas, la planificación y la programación de las cuestiones de derechos humanos;

b) descubrir, implicar y formar dirigentes apropiados y calificados de la comunidad, para la determinación, la planificación y la ejecución de los programas y los servicios necesarios;

c) capacitar y formar dirigentes entre los desfavorecidos en materia de derechos humanos;

d) desarrollar la capacidad de autoayuda de los desfavorecidos en materia de derechos humanos;

e) desarrollar estructuras y métodos de campañas de concienciación, comprendidos los medios de comunicación social y populares;

f) establecer vínculos con movimientos afines;

g) organizar grupos de autoayuda no organizados anteriormente;

h) conseguir la cooperación de personalidades de la comunidad;

i) solicitar, movilizar y coordinar recursos locales, nacionales e internacionales;

j) recoger fondos;

k) documentar y presentar datos no registrados anteriormente;

l) reconocer y adaptar los servicios existentes;

m) promover leyes en beneficio de los grupos afectados;

n) evaluar los efectos de las medidas adoptadas juntamente con las personas y los grupos afectados y con grupos y organizaciones que tengan relación con ellos.

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